
Cisnes, flamencos patos silvestres y otras variedades de pájaros son testigos de un paisaje atípico, conmovedor, con el sonido de mar como único fondo.

La desembocadura del Río Sauce Grande o “La Boca” -que es el nombre con el que los lugareños llamamos al lugar-, hace referencia al encuentro del río con el mar, luego de recorrer un extenso camino. Partiendo desde la altura de Sierra de la Ventana y sorteando en su paso hacia el Atlántico médanos y suaves arenas, finalmente se encuentra con la inmensidad del océano.

La desembocadura se encuentra aproximadamente a 8 kilómetros al este del sector poblado y su unión con el mar representa uno de los límites de la extensa playa montehermoseña.
Muchos lo proclaman como un lugar ideal para la pesca, de frente a la increíble inmensidad del agua y rodeado de médanos blancos que varían constantemente de tamaño y lugar por el desgaste de la erosión eólica.

Para acceder al lugar es necesario trasladarse en vehículos aptos para transitar por la playa. En temporada estival se pueden contratar excursiones que cubren ese circuito.